Te amaremos hasta que nuestro corazón deje de latir

13 de febrero de 2012

Luchando por un Amor (M)

                         

Capitulo 36: Cambios
ALICE
Todo estaba listo habían pasado ya tres meses desde que los Vulturis se llevaron a Bella y ahora estábamos listos para ir por ella y además derrotar a los líderes de nuestro mundo.
-hay un punto que no hemos considerado- no dijo Carlisle
-de que hablas? Todo está cubierto- aseguro Emmet
-no hablo de la batalla si no de después- nadie entendió su respuesta solo Edward que por supuesto lo escuchaba en su mente
-si terminamos con los Vulturis nuestro mundo quedara sin ley, aunque nos cueste aceptarlo ellos han mantenido a nuestra especie a salvo aun por medio del miedo, si nos quedamos sin gobierno las cosas podrían salirse de control
-tienes razón, no pensamos en eso antes- asintió Jasper
-y que es lo que propones, quedarnos con el poder? Podríamos hacer grandes cambios- Emmet parecía entusiasmado con la idea
-no, en ese caso tendríamos que ser capaces de proporcionar castigos fuertes a los infractores y al menos yo no creo poder
-eres demasiado bueno cielo- agrego Esme viéndolo con ternura
-y bien que se supone que aremos? Dejaremos que otro aquelarre gobierne?- pregunte
-creo que tengo una mejor idea- agrego Edward pensativo
-y que es hijo- pregunto Carlisle interesado
-bueno en el pensamiento de los lideres encontré que nos querían destruir para no tener que compartir el poder con el otro aquelarre más grande y unido, y si ese es el punto?
-no entiendo- le dijo Rose
-bueno y si compartiéramos el poder, que sea una democracia en lugar de una dictadura
-eso podría funcionar, hacer grupos por territorio que participen en las decisiones importantes y que ejerzan la ley, así la responsabilidad y el poder no caerían sobre solo uno.
-eres un genio hermano- le alabo Emmet 
-aun así tendría que haber un gobernante para que todo sea justo, se que podrías con ese puesto Carlisle no hay vampiro más justo que tú en este mundo
-gracias Alice, si podría funcionar
-entonces está listo, ya no hay mas asuntos pendientes es hora de prepararnos para la batalla final
-tenemos que movernos ya, los boletos están previstos para el lunes y solo tenemos tres días exactos- nos apremio Edward
Habíamos decidido atacar en los días de semana ya que los fines de semana Volterra era muy frecuentada por turistas y si por alguna razón termináramos expuestos ante los humanos era mejor que fuera una cantidad pequeña, además lo haríamos tarde en la noche para evitar el sol radiante de Italia.
-Alice- me llamo Jasper en la habitación mientras terminaba de arreglar la maleta, podía sentir la preocupación emanando de el
-que ocurre?- le pregunte
-y si algo sale mal?- no necesitaba explicar mas ya que yo también tenía esa preocupación
-esperemos que no sea así
-pero y si pasa?- insistió
-si uno de los dos pierde la batalla entonces tendremos que aprender a sobrevivir sin el otro
-pero yo no quiero dejarte ir, si tú te vas me iré contigo- me aseguro
-si tu murieras te gustaría que te siguiera?- le pregunte tratando de hacerlo pensar en la situación
-claro que no
-exacto, podríamos no pensar en nosotros mismos si no en el otro
-no sé si pueda
-por eso lucharemos con todo para continuar juntos- le jure mientras mantenía nuestras manos unidas 
EDWARD
La casa estaba llena de despedidas, algunas silenciosas como Carlisle y Esme que solamente se mantenían con las cabezas unidas mirándose sin hablar pero con mil pensamientos de amor y otras más ruidosas como Emmet y Rose en la última habitación de la casa en la que no quería ni detenerme un minuto.
Solo esperábamos la hora para partir, ya todo estaba acordado y organizado, cada quien tenía su papel asignado al igual que su lugar, habíamos tenido tiempo suficiente para meditar cada pequeño detalle y un plan b y c por si el primero no ocurría como lo imaginábamos.
-la manada no debe tardar en llegar, saldremos justo al atardecer no debemos arriesgarnos a encontrarnos con algún excursionista despistado por el camino
-bien, yo los llevare al aeropuerto en el jeep y Edward en el de Carlisle- dijo Emmet 
Solamente Seth, Colín, Leah y Embry se irían en avión desde el pueblo haciendo algunas escalas y de los nuestros Alice y Jasper los acompañarían al igual que Carlisle y Esme, enviaríamos las maletas a nuestros correspondientes destinos. El resto correríamos hasta algunas ciudades para tomar diferentes aviones en el camino.
-estas lista?- le pregunte a mi novia
-si estoy lista, será mejor que nos marchemos 
-estamos todos Jacob es hora de irnos
-de acuerdo vamos- asintió en su pensamiento y llamo a su manada
Aun cuando no lo usara como una orden el timbre del alfa estaba en sus pensamientos, era muy impresionante lo mucho que había madurado desde que se había unido a la manada y más ahora que se había vuelto el líder que siempre debió de haber sido
JACOB  
Ya comenzábamos el camino rumbo a la primera ciudad donde se quedarían Jared y Quil para tomar un avión el resto del camino con la rubia y su enorme novio. Yo avanzaría con Edward y Bree casi todo el camino para asegurarnos de que no hay problemas. Nos reuniríamos en una ciudad de suiza con los demás vampiros que participarían
Edward nos había advertido que solo otro grupo era como ellos, el resto se alimentaba de humanos como los demás pero tendríamos que abstenernos de peleas pues los necesitábamos para lograr algo, sería muy difícil no cabía duda de que sería muy complicado detener nuestros instintos.
-no te preocupes los dejaremos aparte de ellos para evitar riesgos, ellos tampoco confían mucho en ustedes- me dijo riéndose
-no deberían- le dije un poco más serio
Ya corríamos por la linde de la montaña de la ciudad, pronto conseguiríamos llegar a donde estaba la razón de mi vida, me alegraba y me llenaba de energía el aminorar la distancia de ella y de mi hijo.
BELLA
No había podido reaccionar a la acción de Alec cuando me beso y simplemente no le había respondido, me había quedado como estatua, vi como abría los ojos después del contacto y percibí lo obscurecidos que estaban por la sed que le había provocado además de unas muy marcadas sombras bajo los ojos
-pensé que no lo lograría- me dijo muy satisfecho
-hacer qué?- pregunte aun aturdida
-controlarme lo suficiente
Sus palabras me aterraron y entonces me desmaye, ya no supe nada de mi hasta un rato después, no estaba segura de cuánto tiempo me había quedado inconsciente pero las emociones me habían bloqueado
-Isabella?- pregunto muy cerca de mi- necesitas que te consiga algo?
-no, solo fue un desmayo
-pero no lo entiendo no te hice daño ni nada- parecía culpable y pensé dejarlo con la idea por un rato pero desistí
-solo me sobresalte demasiado por lo que paso
-ha- fue su gran respuesta
-no debiste hacerlo
-hacer qué?- pregunto confundido
-besarme, no te lo permito
-entonces te quedaras sin privilegios- trato de chantajearme
-no me interesa, no quiero que vuelvas a hacerlo
-porque no?- pregunto molesto de nuevo
-en primer lugar porque me pones en riesgo mientras siga siendo humana, y en segundo lugar porque yo no te quiero ya te lo he dicho.
-pero lo harás- contesto antes de salir de la habitación
En un momento me sentí tan perseguida como ocurrió con Victoria, no quería pensar hasta que punto podía llegar la obsesión de un vampiro. El tiempo había trascurrido lento después de aquella sorpresiva situación. Estaba a punto de cumplir tres meses de mi encierro, no había vuelto a suceder nada así con Alec pero cada que estábamos solos me acariciaba el rostro o me tomaba de la mano la cual yo trataba de retirar pero con un simple apretón un poco mas fuerte me obligaba a mantenerla hay.
-Alec no puedes hacerme esto, éramos amigos y ahora me tratas como tu prisionera, haces lo que te place conmigo
-eso no es verdad, solo te cuido y trato de convencerte de que puedes ganar mucho si te quedas conmigo
-ya te lo he dicho que no quiero estar contigo, yo amo a Jacob- cada vez que mencionaba el nombre de mi prometido era como si lo hubiera maldecido
-no volverás con él y tampoco te quedaras con ese hijo suyo
-por favor, no hagas esto, yo te aprecio como un amigo por todo lo que has hecho por mí pero las cosas no son como las vez- no pude evitar las lagrimas
-no llores- me pidió más tranquilo
-tú no eres esto Alec, sé que no lo eres, te han convertido en uno de ellos pero te aseguro que si conocieras más que solo lo que hay entre estas paredes podrías ser más feliz; si no te niegas a descubrir podrías encontrar la persona indicada para ti- mis palabras parecieron hacerlo dudar
-no lo creo, no conozco más que esta vida
-pero si pudieras irte podrías conocer más, ver las cosas buenas y no solo las malas que ves aquí
-Aro jamás me lo permitiría- en eso tenía razón dudaba que Aro dejara ir una de las joyas más valiosas de su colección
-pero podrías intentarlo, te has controlado de matarme y si lo intentas tal vez lo puedas hacer con mas personas
-con qué fin?
-tal vez pudieras conocer a lo que queda de tu familia, o alguna chica que te pueda querer realmente humana o vampiro
-jamás me aceptaras cierto?- y por primera vez vi la comprensión en su mirada
-lo siento Alec pero yo no soy la persona para ti- le dije mientras le acariciaba la mejilla- te aprecio muchísimo pero solo como un amigo
No quería herirlo con mi desprecio pues le debía mucho incluso la vida ya que me había defendido de un vampiro rebelde que trato de atacarme resultando herido pues no había tiempo de utilizar su poder y se había enfrentado físicamente, claro que después ese vampiro recibió el castigo directamente de las manos de Aro dejando de existir por su desobediencia
Sin decir palabra se había empezado a levantar de la cama donde estábamos sentados hablando y me beso la mano, dejándome sola sin voltear; hasta cierto punto podía comprender su actitud sin juzgarlo, toda su vida había obtenido lo que quería a la buena o a la mala, que aceptara que no era para él era un gran reto que apreciaba realmente de su parte.
Me quede recostada acariciando mi vientre que ya comenzaba a notarse ligeramente puesto que era delgada, estaba por cumplir los cuatro meses de embarazo y me sentía muy feliz pero a la vez eso significaba que mi tiempo se agotaba.
Tome mi capa para regresar al salón ahora que estaba sola, al fin había conseguido aprender el camino y dejar de perderme, en cuanto entre a la habitación Aro poso su mirada en mi
-donde está Alec?- me pregunto directamente
-no lo sé, no estaba conmigo- le respondí mientras me sentaba en mi lugar habitual en el que Aro había mandado colocar un taburete para mi
-vaya cambio que has provocado en el- me dijo acercándose a mi
-de que habla?- pregunte haciéndome la inocente
-el jamás se había interesado en nadie, ni siquiera en Jane
-pues yo no lo conocía antes de venir por lo que solo se lo que he visto
-vaya que eres muy diferente, me pregunto si tendrás algún otro talento además del escudo, todo parece indicar que vuelves locos a los hombres; primero Edward y algunos chicos de tu escuela como pude ver en sus pensamientos, después ese lobo y ahora Alec
-no es mi intención- me defendí
-eso es claro, podríamos utilizarte para crear discordia entre algunos vampiros
-muero por servirle- le respondí sarcásticamente, el se rio y regreso a su lugar
Después de unas horas en el salón apareció Alec por la puerta pero no entro solo me hiso una señal para que lo siguiera
-ya lo vez- me dijo Aro antes de salir, no me moleste en contestar
-qué pasa?- le pregunte a Alec
-solo vamos a tu cuarto, no es seguro hablar aquí
No dijo nada mas durante el trascurso por los pasillos, entre en la habitación y tras de el cerro la puerta
-y bien?
Sin contestarme me tendió el teléfono, me había restringido aun mas las llamadas para impedirme hablar con Jacob pero eso también limito mis llamadas a papa y Alice, aun era temprano por lo que papa no estaría en casa
-estás seguro?
-no tiene caso, además era mi regalo
-gracias Alec y lo siento…- no me dejo terminar de hablar
-ya lo tengo claro, pero somos amigos no?
-claro que si, gracias de verdad
Llame rápidamente a la casa Cullen sin obtener resultados, me pareció extraño siempre al menos Esme estaba en casa, llame a Alice a su teléfono celular pero me dirigía inmediatamente al buzón debería estar apagado
-ocurre algo?- pregunto Alec cuando vio que seguía intentando
-no logro comunicarme con nadie, llamare a la comisaria de mi padre
-bueno, hola Scott, mi padre esta hay?
-ha Bella, si ahora te lo comunico
-gracias espero
-Bella? Qué ocurre? Estas bien?
-si papa no hay problemas solo que tenia oportunidad de llamar, como estas?- no quería levantare sospechas preguntando de inmediato por los Cullen
-muy bien hija, todo está bien por aquí y a ti como te va con los viajes?
-excelente papa, conociendo mucha gente agradable. Y los Cullen y mis amigos de la reserva?- le pregunte haciéndome la desinteresada
-están bien, los Cullen se han ido de vacaciones a una playa en no sé donde- exactamente al lugar donde menos irían, algo pasaba
-a que bien, si se divierten mucho en la playa- mentí- y Jacob no ha ido a verte
-si se paso por aquí el fin de semana, creo que se iba en un viaje de estudios con algunos chicos más de la reserva, bueno eso me dijo Billy- claro que eso no podía ser verdad
-a ya recuerdo, si la última vez que hable con él me lo conto
-me da gusto que cumpla su palabra de estudiar y de dejarte hacer lo mismo aun casados
-sabes que es un buen chico papa
-si lo acepto
-papa debo irme, lo siento pero prometo llamar pronto
-bien hija cuídate mucho, me alegra oírte
-a mi también papa, hablaremos luego- y colgué
Esta vez Alec me había dado algo más de intimidad alejándose un poco pero en cuanto me quede callada regreso a la habitación
-todo bien?
-si muy bien, mi padre está en el trabajo
-que bien, será mejor que me lleve el teléfono antes de que nos cause problemas.
-puedo acompañarte, no intentare nada lo prometo, solo quiero caminar un poco- jamás había visto la habitación de Alec
-está bien
Salimos por los pasillos y recorrimos  por un par de minutos hasta que nos cortaron el paso
-Alec!!- lo llamo casi en grito
-que ocurre Sarah?
-algo va mal
-de que hablas, donde?- le interrogo Alec
-este lugar ya no es seguro, lo puedo sentir
-qué? Estas segura?- le pregunto
-claro que si, puedo sentirlo ya te lo dije, hay que avisar a los ancianos
Ahora entendía, por eso los Cullen se habían ido a la vez que los Quileutes, ellos venían por mi tenía que ser eso o jamás habrían dejado Forks; pero si ellos avisaban a Aro jamás podrían llegar aquí siquiera. Tome a Alec del brazo y el volvió su rostro para mirarme negué con la cabeza y el vio algo en mis ojos que entendió mi mensaje no hablado
-bien Sarah yo me encargo, pero no le digas a nadie más hasta que Aro nos diga que hacer, es una orden
-está bien- le contesto la chica un poco más tranquila pero claramente ansiosa
Justo en ese momento el celular comenzó a sonar y cuando él lo saco para ver que ocurría pude ver en la pantalla que era Alice, era mi confirmación.
-márchate ya, yo hablare con los ancianos y recuerda que es una orden- le indico a la chica que salió corriendo
El me hiso entrar en su habitación pero el celular había dejado de sonar, no preste atención a nada solo me senté en su cama mientras el supervisaba que realmente estuviéramos solos
-qué rayos pasa Isabella?
-son los Cullen, ellos deben venir para acá dispuestos a rescatarme; no estaban en Forks ni tampoco la manada son ellos Alec es lo que Sarah siente
-pero ellos nos son un peligro considerable, jamás pasarían las puertas principales
-noooo! Tú no puedes avisarle a Aro, los mataran a todos, Alec por favor hazlo por mí- mi voz se estaba elevando por las ansias
-cállate nos escucharan, tienes que calmarte; que se supone que haga?
-no se los digas por favor- le rogué de nuevo
-sabes que no podrán con la guardia, es muy probable que ellos mueran de todas maneras
-lo sé pero si les avisas tal vez los capturen y los castigues y si solo se enfrentan no, por favor Alec
-bien, está bien, pero tienes que calmarte o te pondrás mal de nuevo.
Asentí con la cabeza aunque no podía calmarme, como calmarme si las personas que más quería venían a encontrar la muerte por salvarme; trate de levantarme para ir al salón enterarme de lo que sabían y lo que harían o no algo, pero Alec me negó el paso
-no puedes salir de aquí, si acaso llega a darse una batalla tienes que estar segura
-pero no sabré que ocurre
-es mejor así, necesito estar con ellos, ver qué ocurre
-no me dejes sola- le pedí en una suplica
-necesito ver qué pasa, yo te traeré noticias cuando todo pase- se quedo muy pensativo por un segundo
-te buscaran aquí, saben que te protejo tengo que llevarte a otra parte
-pero a donde, me encontrarían fácilmente, mi olor y mi corazón
-entonces te llevare a donde menos te buscarían tratare de distraerlos pero necesitas estar calmada o tu corazón acelerado los alentara
-está bien
Entramos a una enorme habitación incluso más grande que el salón, que a la vez parecía una biblioteca pues tenía las paredes cubiertas de libros de todos tamaños y antigüedad solo que sin cama
-es la habitación del propio Aro jamás te buscaran aquí, me voy, tienes que calmarte o no funcionara
-está bien ten cuidado

2 comentarios:

  1. nataly

    me dejas en shock...intrigada y ansiosa por leer mas de esta historia eres muy buena
    elsa

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    Respuestas
    1. Gracias!!!!!
      y prometo estar super al pendiente de sus comentarios
      las quiero

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