Luchando por un Amor (M)

Capitulo 32: Tiempo sin ti

Alice

Bella tenía tres días de que se había marchado con los Vulturis, yo estaba muy triste por su ausencia además de que no lograba verla con claridad por el bebe, después de todo tenia la sangre de licántropo aunque aún no se transformara lo que me impedía ver.

Habíamos inventado a Charly un viaje a la playa por una semana, y gracias a mis habilidades se lo había creído sin esperar una llamada pronto. No podríamos ocultarle su ausencia por mucho tiempo, y el padre de Jacob también trataba de ocultarle que su hijo no estaba en casa y que estaba destrozado, siempre que lo llamaba le decía que se había ido con los chicos o que fue a Port Ángeles entre otras cosas.

De Jacob no sabíamos nada desde que se fue del claro, y ya que los de la manada ya no podían comunicarse con él era complicado tratar de encontrarlo, cuando Jasper se había acercado lo suficiente lo había percibido con una inmensa tristeza y en cuanto Jake sintió su presencia había acelerado al máximo para alejarse de él, definitivamente quería estar solo pero aun así estábamos preocupados.

-Edward que vamos a hacer? No podemos dejarla con ellos, no estando embarazada, hasta ahora no he visto que cambien las cosas aun la veo con su vientre crecido pero puede significar que aun no se lo ha dicho a los Vulturis

-lo se lo sé, estoy tratando de pensar en algo, pero no encuentro solución, como se supone que iremos a Volterra por Bella, justo al corazón de los Vulturis, jamás podremos ganarles en sus tierras y con el numero de la guardia ni siquiera nos acercaríamos

-además no se arriesgaran a sacarla fuera de su territorio, transformada o no

-necesitamos información, algo que nos dé una ventaja sobre ellos, deben tener una debilidad en alguna parte, no pueden ser completamente invencibles, pero quién se atrevería a traicionar a los Vulturis- se quedo pensando por un largo rato

-crees que funcionara tratar de engañarlos solamente para sacarla de ahí, no una lucha real sino una distracción y huida?- tenía la esperanza de encontrar algo útil

-sabes que Demetri nos encontraría en cualquier parte y tienen toda la vida para buscar su venganza. Tenemos que encontrar la manera de terminar con ellos o jamás podríamos vivir tranquilos de nuevo

-ha estoy harta de encontrar opciones inútiles, me mata no poder ver nada

-no podrás ver nada hasta que sepamos qué hacer, ellos ya tienen previsto lo que harán por eso no cambia lo esencial- me recordó

-por ahora tenemos que seguir con la farsa de que nada ocurre y esperar hasta encontrar el plan adecuado, no podremos esperar mucho tiempo

-en eso tienes razón, Seth se acerca por el rio, creo que te busca

-está bien voy a fuera, espera no te necesito para traducir?

-no, está dispuesto a cambiar, el confía en nosotros

-sí, es un buen chico

Salí de la casa para verlo cerca del rio, ya venía en camino en su forma humana, aun era un niño con mucha musculatura

-hola chico

-hey Alice venia a buscarte precisamente

-si ya lo sé, que ocurre?

-quería saber si hay alguna novedad- pregunto algo triste

-lo siento Seth pero no hay nada nuevo, y como van con Jake?

-sigue sin hacer contacto con nosotros, hemos intentado llamarlo con nuestro aullido pero no responde, seguimos sin poder escuchar sus pensamientos y aparentemente tampoco nos escucha, siento que le estoy fallando a la promesa que le hice a Bella, como se supone que lo voy a cuidar si ni siquiera sé donde esta?

-no tienes que sentirte mal Seth no es tu culpa, el decidió alejarse por ahora pero sé que volverá en algún momento y podrás cumplir tu promesa

-Leah piensa que si no lo conectamos pronto podría enfermar por la falta de su objeto de imprimación- se le veía realmente afligido

Edward nos había contado que Seth siempre había considerado a Jacob como un hermano mayor, y era su ejemplo a seguir a pesar de que Sam era el líder de la manada, lo apreciaba muchísimo.

-Jasper es quien tenía posibilidad de convencerlo si lograba ejercer su poder sobre él, pero en cuanto lo sintió siguiéndolo acelero el paso y eso fue cerca de Canadá- le conté

-espero que se calme pronto, aunque eso de la imprimación podría incluso matarlo según las leyendas, no entiendo cómo puede afectarte físicamente algo así?

-nosotros tampoco podemos entenderlo, pero esperamos no sea el caso, el sacrificio de Bella seria en vano

BELLA

Ya habían pasado cuatro días desde que llegue a Volterra y las cosas no habían cambiado demasiado, seguía pasando la mayor parte del tiempo en el salón con Aro, llorar por las noches al recordar a mi gente hasta quedarme dormida, comer en el restaurante del museo y ver algo de gente normal y corriente.

Aun me resistía a entablar lazos con los privilegiados pues me trataban como algo comestible y no como persona, me llamaban la consentida porque Aro me concedía lo que le pidiera, los síntomas del embarazo continuaron aunque ahora sabia como evitar las molestias, no levantarme muy bruscamente, comer a la misma hora y cumplir los antojos cuanto antes.

Solamente Alec se preocupaba realmente por mis necesidades, en algunas ocasiones incluso había salido del castillo para conseguirme lo que deseaba, jamás hablamos de nosotros pero pasaba mucho tiempo a mi lado, era extraño pero agradecía su presencia. Jane obviamente cada vez me odiaba más, no sabía definir si era por la preferencia de Aro hacia mi o por alejar a su hermano de ella.

-porque lloras todas las noches?- me pregunto un día que me acompañaba a mi habitación, aun seguía perdiéndome constantemente

-porque extraño a mi familia, no puedo evitar pensar en ellos cuando no tengo en que ocupar la mente

-y por eso has terminado un libro tras libro?

-sí, prefiero tener algo en que pensar hasta que casi me vence el sueño

-y porque duermes tanto, no recuerdo mucho de mi tiempo de humano pero según yo no dormía tanto

-de hecho es algo del embarazo, las hormonas hacen que me dé sueño

-y esas comidas raras que pides también son consecuencias de eso?

-si en gran medida, pero Alec porque haces esto?

-hacer qué?- pregunto a la defensiva

-bueno te agradezco que me ayudes con las cosas pero me gustaría saber porque te intereso- trate de explicarme lo mejor posible

-bueno es que cuando era humano una de mis hermanas estaba esperando a mi sobrino, pero no me quede lo suficiente para verlo

-y no lo buscaste después, es decir luego de que naciera?

-no, no quería matarlo si no podía controlarme- me quede sorprendida por su explicación pero a él pareció no importarle

-llegamos- me dijo cuando paramos frente a mi puerta

-no podrías acompañarme un rato? no quiero estar sola pero estoy cansada como para quedarme en el salón

-estás segura?- pregunto algo dudoso, como si debiera desconfiar de el

-no me molestaría

-de acuerdo- entramos en el cuarto y yo me dirigí a la cama automáticamente el se quedo parado a un lado apoyado contra una de las barras de la cama

-se que no lo necesitas pero puedes sentarte

-creo que aquí estoy bien

-puedo preguntarte algo?- no sabía si era lo correcto pero sentí curiosidad por el

-si

-desde cuando estas con los Vulturis?

-aproximadamente 10 siglos, no se consideraba demasiado el tiempo

-wow, y tenias mas familia?

-sí, estaban mis padres y tres hermanas, yo era el único varón

-cuantos años tenias cuando te transformaron?

-estaba a punto de cumplir 15, pero mi entrenamiento empezó desde antes al igual que el de Jane

-la conocías desde antes?

-no, pero los Vulturis nos entrenaron al mismo tiempo y nos hicimos algo así como hermanos

-a ya veo

-y tú tienes familia?- me pregunto y yo sentía la necesidad de ser honesta

-solo mis padres, soy hija única, ellos se divorciaron antes de que hubiera oportunidad de alguien mas

-es por ellos por quien lloras?

-si en parte, pero también hay otras personas a las que extraño

-los Cullen y esos lobos- concluyo acertadamente

-si ellos son mis amigos verdaderos, y Alice es como mi hermana así como tú lo eres con Jane

 -y el padre de tu hijo?

-se llama Jacob Black y pertenece a la manada

-lo quieres?

-es algo más que eso, antes de que se transformara en lobo la primera vez ya nos queríamos o algo mas, pero cuando se completo su licantropía nos imprimamos

-que se supone que es eso?

-bueno, es muy difícil de explicar, es la forma en que ellos encuentran a sus parejas, la mejor oportunidad de pasar la magia a otra generación, es una unión muy fuerte más que el amor mismo

-pero tu estas aquí

-pero el debe estar sufriendo por no poder estar conmigo- no pude evitar que un par de lagrimas rodaran por mis mejillas

-y entonces porque decidiste venir con nosotros? No lo entiendo?

-porque Aro prometió que no les haría daño si yo me unía a la guardia, eso significaba que podrían vivir y mi intención es entregarle a este pequeño a su padre, así podrá tener una vida tranquila y los cuidados necesarios- le explique mientras acariciaba mi vientre aun plano

-y como es que los Cullen entran en todo esto?

-bueno como ya debes saber ellos son diferentes, solo se alimentan de animales y gracias a eso pueden convivir con las personas, bueno algo parecido ya que aunque no sepan la razón real los humanos les temen un poco, ellos hicieron un tratado con los Quileutes la tribu de los licántropos para asegurar una cohabitación aunque nunca habían estado tan unidos

-y tu tuviste la culpa?

-no lo diría es esos términos pero si, su amistad es en gran parte por mí, ellos trataron de defenderme juntos lo que les brindo un enemigo en común

Seguimos charlando sobre algunos otros detalles hasta que incluso se había sentado junto a mí en la cama, pero el sueño me venció por completo

Cuando desperté ya no estaba, no me sorprendió pues no era de mucho esperarse que se quedara a mi lado mientas dormía. Tome uno de los libros para pasar el rato ya que estaba comenzando a sentir hambre pero no sabía si me traerían la cena o tendría que ir por ella.

La puerta se abrió despacio y asomo el rostro por la abertura

-a ya estas despierta, te gustaría salir un rato?

-salir?- pregunte desconcertada desde que llegue nunca había salido solo al museo

-sí, tienes permiso de salir a la ciudad por comida si vas acompañada

-y tú serás mi acompañante no es así? Pero qué hora es?- estaba muy contenta de tener la oportunidad

-es cerca de media noche, vamos

Me levante rápidamente de la cama lo que me provoco un gran mareo por olvidar mis precauciones, me sentí caer pero no termine en el piso como era de esperarse

-Isabella? Qué te pasa? Estas bien? Necesitas algo?- parecía preocupado

-no, estoy bien, solo fue un mareo, dame un segundo y estaré lista

El no me soltó hasta que estuvo seguro de que no me caería, y después regreso a la puerta

-tal vez sea mejor que te traiga algo aquí

-no!- respondí alarmada de perder mi oportunidad de salir- estoy bien de verdad

Salimos del castillo una vez que me recupere por completo, la ciudad era muy bonita aunque no muy grande, me recordaba demasiado a la cuidad de mis pesadillas, pero esta vez no corría iba lado a lado con uno de mis perseguidores

-quédate aquí y pide tu cena, ahora regreso

-pero a dónde vas?- no esperaba que comiera conmigo pero tampoco que me dejara sola

-solo voy a buscar algo y regresare por ti

-de acuerdo

Una vez que Alec se alejo ordene algo de comida y casi cuando había terminado mi platillo regreso con algunas bolsas

-puedo saber qué es eso?- pregunte por mera curiosidad

-necesitas más de un cambio de ropa si vas a salir algunas veces a la ciudad, solo podrás hacerlo de noche pero…

-es genial-grite demasiado alto y mi reacción fue lanzarme sobre él con un abrazo, las hormonas me tenían descontrolada

No considere mi error hasta que lo sentí completamente tenso entre mis brazos, retrocedí de inmediato y pude ver el negro más obscuro en sus ojos, no respiraba

-yo… lo lamento, no lo pensé

-deberíamos evitar este tipo de contacto, y yo no debería estar contigo sintiéndome sediento, has terminado? Es hora de volver, tengo que dejarte en el castillo antes de irme de caza

Un escalofrió recorrió mi espalda al completo, y no pude evitar responderle con un tartamudeo en las palabras. Una vez que estuvimos de nuevo en el castillo nos encontramos con Jane en uno de los pasillos

-dónde estabas? Te he estado buscando- le reclamo a Alec

-Salí un rato para comprar unas cosas

-ahora sacas a pasear a la mascota de Aro?- me miro de forma despectiva

-tranquilízate Jane- le advirtió

-lo que sea, tenemos que ir a cazar, el amo no quiere que arriesguemos a su preferida

Una vez en mi habitación dejo las bolsas en la cama, y se quedo un momento en la puerta sin prestarme atención, de pronto se acerco a donde estaba viendo la ropa que me había comprado y saco una pequeña cajita de una de las bolsas y la abrió con su velocidad vampírica

-te tengo otro regalo pero solo podrás usarlo cuando yo te lo diga y luego me lo llevare- me entrego un teléfono celular- podrás llamar a quien tu quieras

-muchas gracias Alec, de verdad te lo agradezco- estuve a punto de acercarme de nuevo pero el interpuso las manos- lo siento

-has la llamada rápido antes de que alguien se acerque, me están buscando para ir de caza

No sabía a quien llamar, podía llamar a Jake pero seguramente no estaba en casa y no sabía si traería su celular encima, podría llamar a mi padre pero estaría dormido, solo me quedaba mi última opción, Alice, menos mal que sabía su número de teléfono de memoria.

JACOB  

Había perdido la noción del tiempo desde su ausencia, después de que entrara en fase para huir de esos sentimientos no había regresado ni hablado con nadie, en un momento sentí la presencia de un Cullen tras de mí pero aumente la velocidad pues no quería ningún tipo de contacto con nadie.

Estaba muy confundido, perdido entre los instintos de mi forma lobuna, olvidándome de mis sentimientos humanos, pero no podía alejarme del vacío que tenía en el pecho, estaba cansado de correr, no había cazado nada y había tomado muy poco agua, estaba debilitándome muy rápido pero no tenía ninguna motivación para continuar, Bella se había marchado dejándome atrás con apenas una despedida y una explicación que no me decía nada.

Además estaba mas solo ya que por mi decisión de apartarme de la manada había perdido el apoyo de mis hermanos, sabía que si regresaba me recibirían con los brazos abiertos pero dudaba mucho que el asunto de ser un alfa fuera como un botón que se pudiera prender y luego apagar.

Estaba haciéndose de noche de nuevo, yo seguía corriendo ya que no lograba conciliar el sueño por las horribles pesadillas en que veía a mi perdido amor convertida en un vampiro de ojos rojos.

Cuando el bosque comenzó a verse borroso ante mi paso pude darme cuenta de que no duraría mucho tiempo, pensé en la esperanza de la paz que traería consigo la muerte, no mas pensamientos, no mas malestares, no mas recuerdos, no mas tristeza y dolor, era realmente alentador, considere la idea de entregarme a ella una vez que mis patas ya no me respondían y caí al suelo frio y húmedo, podía simplemente quedarme ahi sin luchar y sin hacer absolutamente nada.

Pero no lo haría, Bella me había pedido que viviera, que lo hiciera porque ella no podría, ella se había sacrificado para darnos un lugar en el mundo a nosotros y si ahora dejaba de existir seria como faltarle a ella, al amor que le tenía; tal vez en su nueva vida podría verla de nuevo por una última vez, ella no sería la misma, sería una de mis enemigos pero prefería eso a saberla en algún lugar sin volver a verla jamás. 

No sabía que hacer, no duraría mucho tiempo con la fuerza que me quedaba y estaba demasiado lejos de casa para poder regresar, no podía llamar a mis hermanos por mi pensamiento ya que no nos escuchábamos, ahora era un inconveniente lo que me había parecido muy bien en un principio, no encontraba una opción que pudiera utilizar y obviamente no tenía el celular conmigo ni ropa que pudiera ponerme para acercarme a algún camino.

Me concentre en recordar cada buen momento y mi tiempo con Bella, trataba de imaginar cómo habría sido mi vida a su lado, después de casarnos y vivir juntos, tener una familia algún día, el vacio de mi pecho se hizo más hondo y casi me absorbía por completo.

Pensé en la posibilidad de que alguno de mis hermanos siguiera buscándome en su forma de lobo y solo pude confiar en encontrar a uno

Seth- pensé con todas mis fuerzas antes de perderme en la obscuridad

Alec

No sabía que era lo que me motivaba a ayudar a esa humana, tal vez era cierto que me recordaba a mi hermana pero en algún lugar de mi cabeza sabia que tenía que haber algo mas, en momentos de desesperación y sed había matado a muchas personas, hombres, mujeres incluso niños sin remordimiento alguno solo por callarlos ya que no tenían suficiente sangre en el cuerpo como para satisfacerme.

Después de dejar a Bella cada noche en su cuarto había regresado solo por curiosidad a ver qué es lo que hacía, siempre la escuchaba llorar, pero porque estaba tan triste siempre? Que podía haberle dado esos vampiros antinaturales y el lobo que tenía por pareja que fuera mejor que lo que tenía frente a ella ahora

Me confundía mucho y eso despertaba mi curiosidad en ella, habíamos hablado algunas veces sobre mi corta vida humana y también de lo que ella hacía antes de que la trajéramos a Volterra, en una de nuestras conversaciones me había quedado hablando solo, no fue hasta que esperaba una respuesta de ella que note que estaba dormida, me quede observándola durante un rato y de pronto comenzó a hablar, me pregunte si la había despertado pero continuaba con los ojos cerrados, hablaba sobre ese Jake como ella lo llama.

Salí del cuarto cuando escuche que alguien se acercaba por el pasillo, no quería mostrar mi interés en ella, todos conocían mi relación con Jane pero esto no era igual, con ella había pasado prácticamente toda mi vida y siempre la vi como una amiga, una hermana. Pero después de unos siglos ella había cambiado, se había vuelto más cruel, torturaba a algunos vampiros solo por diversión, hacia que los humanos la temieran antes de matarlos, entre otras cosas

Pensé en la posibilidad de distraer a Isabella, pero como lo justificaba, fui a ver a Aro en el salón, pensé que ya que no podía leer a Bella y confiaba mucho en mi no tendría intención de comprobar mis palabras

-tu protegida tiene hambre- le informe una vez que estuve a su lado fingiendo desinterés

-entonces ordena que le traigan comida- me contesto sin prestar mucha atención

-no sabe que es lo que quiere

-y como se supone que lo voy a saber yo, que se supone que haga?- dijo algo molesto

-puedo llevarla a la ciudad para que elija algo si quieres, jamás escaparía de mi vigilancia si es lo que te preocupa

-lo sé querido, si has eso, ahora márchate que tengo asuntos más importantes que atender

Salí de la habitación con mi coartada, me dirigí a donde ella estaba y le informe acerca de salir a la ciudad, había muchísimos lugares de 24 horas ya que Volterra era solo un lugar de paso; pero cuando se disponía a seguirme casi se cae, la tome antes de que diera con el suelo y me pareció muy frágil entre mis manos, con solo una pequeña parte de mi fuerza podría matarla.

Me prometió que estaba bien y salimos en medio de la noche, la deje comiendo ya que sabía que no intentaría salir huyendo de todos nosotros, le busque algo de ropa común ya que la necesitaría si salíamos a menudo y eso pretendía, en mi camino de regreso encontré una tienda de teléfonos celulares, compre uno.

Cuando me vio con las bolsas y le informe de mis planes se lanzo hacia mí con los brazos abiertos, su olor me dio de golpe sin previo aviso y su cuello quedo expuesto a centímetros de mi boca, con solo un movimiento esa sangre caliente que podía ver en su pulso hubiera sido mía, pero no podía matarla o Aro terminaría conmigo o por lo menos me daría un buen castigo

Fue muy difícil controlarme porque nunca antes lo había intentado, solo tense mi cuerpo lo mas que pude para evitar cualquier movimiento y deje de respirar, no lo necesitaba era solo una costumbre que servía para detectar los aromas en el aire, pero eso también me impidió alejarla o hablarle, me pareció una eternidad hasta que ella lo noto y se alejo de mi, clavo su mirada en mis ojos y pude apreciar miedo en ellos.

Sabía que me estaba arriesgando al brindarle un celular para hablar con sus amigos pero pensando en eso le había impuesto reglas, solo podía utilizarlo cuando yo estuviera con ella para escuchar si alguien se acercaba demasiado y me lo llevaría conmigo cuando terminara.