Siempre fuiste tu (m)

Capitulo 8: extraña palabra

-          -Imprimación? No sé qué es eso.

-          -Bueno, según las historias de la tribu, la imprimación es cuando te enamoras a primera vista, por llamarlo de alguna manera.

En realidad es mucho más que eso, es cuando vez a esa persona que llena tu alma, que te complementa en todos los sentidos, no es la gravedad la que te sostiene a la tierra sino esa persona. Harías y  serias cualquier cosa por tu imprimación su amigo, hermano, protector o lo que sea que ella necesite. Cuando uno sufre, el otro también y así...

-          -Y eso les sucede a todos ustedes?

-          -Se supone que sí, pero no todos están imprimados, solo hay dos que están imprimados en la manada…uno es Sam.

-          -Y el otro?

-          -El otro…s…so…soy yo…

Mis ojos se abrieron desmesurada mente, no sabía que tan buena podía ser esta noticia…debía ir con cuidado, así que decidí tomármelo con calma y preguntar otra cosa.

-          -Y Sam de quien se imprimo?

-          -Y tú de quién crees?- pregunto con una media sonrisa

-          -Leah?!- pregunte dudosa

-          -Si!, le acaba de suceder, cuando la vio entrar en mi casa.

-          -Eso es genial! Quiere decir que estarán juntos, cierto? Y van a ser felices! Hay dios que alegría! Leah se merecía esta dicha!- dije todo tan rápido que Jake se empezó a reír…

-          -Jajaja si, la verdad es genial, pero no nos desviemos del tema…no quieres saber de quién estoy imprimado?

Y ahiii vamos a donde no quería llegar, la sola idea de alejarme de Jacob me producía un dolor horrible…no imaginaba la vida sin él.

-          -Si tengo que ser sincera, diría que no

-          -Qué?

-          -Que no deseo saber de quién estas imprimado. Lo único que me importa es que seas feliz, estando conmigo o con otra persona- las lágrimas ya comenzaban a acumularse en mis ojos, pedían a gritos salir, no iba a poder soportar tanto dolor…

-          -Bella, mírame.

Solo pude negar con la cabeza, no podía mirarlo a los ojos, mi estabilidad caería como una torre de naipes, quise girarme para ir de nuevo a la cocina, no quería escuchar lo que él tenía que decir.

-          -Isabella, levanta la vista- y como si de una orden estricta se tratara mis ojos se elevaron  hasta hacer conexión con los suyos.

-          -TÚ y solamente TÚ podrías ser mi imprimación, te he amado desde que tengo memoria, no hay otra persona más importante en mi vida que no seas tu.

-          -De…de…verdad?- dije hipando, de mis ojos ya caían lagrimas a raudales.

-          -Escucha, JAMAS vuelvas a dudar del amor que te tengo, nacimos para estar juntos, lo olvidaste ya?

-          -Eso decía tu madre.

-          -Y ella jamás nos mintió, no es así?

-          -Es cierto, perdón por dudar amor, soy una tonta, pero es que no me imagino una vida lejos de ti. Aun que esto de la imprimación es muy raro y no comprendo muy bien cómo funciona, tampoco entiendo porque ustedes no envejecen, yo….yo no podría pedirte que dejes de transformarte solo porque soy una egoísta que no puede aceptar cual es el verdadero punto de su transformación.

-          -Bella, no sería egoísta, también es mi decisión dejar de  transformarme.

En ese momento, nos dimos cuenta que Billy se acercaba a nosotros lentamente en su silla de ruedas.

Nos miro a ambos con una sonrisa en su rostro para luego hablar

-          -Es bueno que se hayan contado la verdad, y como ya le he dicho a bella hay cosas que aun no saben y comprenderán mejor todo mas tarde. Créanme y confíen en lo que les digo….

Ambos asentimos con la cabeza, y Jake seco con su mano el rastro de lágrimas que quedaban en mis mejillas.

-          -Ahora basta de tanto arrumaco! A preparar todo para esta noche que también habrá reunión del consejo y deben estar todos presentes!- dijo dando unas palmadas incitándonos a seguir con nuestras labores

Con Leah y Sue terminamos de preparar la comida, tardamos muchísimo ya que era bastante comida la que debíamos hacer. Cuando habíamos terminado Jake vino a mí con mi celular en la mano.

-          -Bells, es Charly, habías olvidado el celular en el asiento de la camioneta.

-          -Hola papa, que tal?

-          -Hola hija, bien, con muchísimo trabajo en la comisaria, quería avisarte que no iría a la fogata ni tampoco a la casa

-          -Oh, ok está bien no te preocupes, luego le pido a Jake que me lleve a casa en su auto porque no traje la camioneta.

-          -Porque no le pides a Sue si puedes quedarte en su casa? No quiero que te quedes toda la noche sola en la casa.

-          -Ok, luego hablo con ella, porque tal vez ni haga falta y nos quedemos todos los chicos en casa de Jake.- en ese instante mi novio, el cual con su agudizado oído había podido escuchar todo me dijo que le dijera a Charly que me quedaría en la casa de él porque Leah también se quedaría y dormiríamos en la habitación de las gemelas.

-          -Mmmm no lo sé bella.-dijo dudando

-          -Tranquilo papa, no pasara nada, es mas Leah iba a quedarse aquí, dormiremos en el -cuarto de las gemelas, de acuerdo?

-          -Ok, hija, confió en ti, debo irme, hasta mañana.

-          -Hasta mañana papa, que tengas buena noche.

Corte la comunicación y me gire para ver a Jake, detrás de él pude ver que venía Leah  tomada de la mano con Sam ambos tenían una enorme sonrisa …mi novio pudo percatarse de que Leah quería contarme lo sucedido, porque por la cara que traía era obvio que había hablado con Sam.

-          -Bueno señoritas, nosotros las dejamos debemos ir a prepararnos para la reunión del consejo, ustedes también deben prepararse, les deje la ropa que deben usar en la habitación de las gemelas, ahí pueden bañarse si lo desean…

-          -Gracias- dijimos las dos al unísono, mientras nos dirigíamos a la habitación de las gemelas….

Una vez en ella no podíamos creer lo que veíamos, sobre cada una de las camas había una blusa blanca, de mangas cortas y una falda larga blanca, con cuantas de madera, estas estaban dispuestas de tal modo en la tela que cuando te lo ponías las cuentas formaban el dibujo de un lobo aullando a la luna, junto a la ropa había collares de madera trabajada de la misma forma que las cuentas de las faldas, y unas bellas sandalias haciendo juego con la ropa.

Ambas tomamos la ropa emocionadas y decidimos primero bañarnos, no queríamos estropear la ropa.

Leah fue la primera en bañarse y vestirse, luego se maquillo de forma suave. Yo por mi parte tome una ducha, me vestí, cepille mi cabello y solo utilicé brillo labial.

-oh bella, tengo tanto que contarte!

- lo sé Leah, Jake también es uno de ellos.

-de verdad? Y ustedes…están imprimados?-pregunto temerosa

- tan imprimados como tú y Sam- dije con una sonrisa en mis labios, pero esta se desvaneció al pensar que Jake jamás envejecería y yo sí.

- te preocupa el tema de envejecer no es cierto?- Leah me conocía como nadie…por eso era mi mejor amiga.

- la verdad si.- dije en un susurro

-tranquila amiga, solo debes tener confianza- dijo guiñándome un ojo, no sabía a qué se refería Leah, pero por el momento solo me encargaría de disfrutar los momentos que pase con Jake.

Una vez listas no sabíamos si salir de la habitación hasta que sentimos unos golpecitos que llamaban a la puerta.

-niñas están listas-era Sue

- si mamá pasa- dijo Leah

Al entrar los ojos de Sue brillaban de emoción. Una bella sonrisa se poso en sus labios, nos tomo de las manos y hablo.

-solo déjense guiar está bien?

Nosotras solo asentimos con la cabeza y guidas por la madre de mi mejor amiga, nos dispusimos a salir de la pequeña habitación….

-Bien adelante, ya están todos esperándolas.-dijo Sue

Con Leah nos miramos sin entender mucho y salimos al exterior de la pequeña casa roja.

Caminamos por el pequeño pasillo que habían formado para dejarnos pasar, bajo las miradas de todos, y como si de una ceremonia religiosa se tratara, tanto Jake como Sam estaban esperándonos, parados junto a los ancianos del consejo.

Cuando llegamos junto a ellos, Jake tomo mi mano y Sam se posiciono junto a Leah.

Uno de los ancianos con un ademan de la mano nos invito a sentarnos en los almohadones que había en el suelo.

Una vez todos ubicados, uno de los ancianos, el que reconocí como “el viejo Atarea” hablo.

-Hermanos y hermanas, bienvenidos a la primera reunión del consejo, después de mucho tiempo volvemos a ser la misma manada que fuimos en siglos pasados….- el viejo atarea hablaba de forma pausada era tan relajante escuchar su voz…

-En esta ocasión vuelve a ser por el mismo enemigo “los fríos”…aquellos mismos fríos que atentan con la vida humana.- mi cuerpo tembló en ese instante y Jake en respuesta solo apretó un poco más el agarre de nuestras manos, para infundirme confianza

-Pero dejemos las cosas serias para otro momento y pasemos a noticias más agradables…

-Como todos sabemos hace poco, para no decir apenas horas- los presentes estallaron en risas por el comentario- en nuestra manada ya contamos con dos parejas “imprimadas”.-suspire

-como he de suponer muchos de ustedes no saben de que se trata esto de la imprimación por eso les pido que me dejen decirles en qué consiste…. Técnicamente la imprimación es para poder dejar una descendencia de licántropos y permitirle al lobo imprimado desarrollarse por completo, ya que no solo tiene como objetivo cuidar de la tribu sino fundamentalmente de su pareja, además con el tiempo pudimos descubrir que no es solo para eso, sino que además es para garantizar la existencia de los lobos actuales, ya que si un lobo no se imprima, con el tiempo ese lobo dejara de transformarse y seguirán el curso natural de la vida.

- eso quiere decir que tanto Sam como Jacob al estar imprimados jamás podrán dejar de ser lobos?- pregunte con miedo

- exacto, bella.-dijo el anciano.

- entonces ellos jamás envejecerán, aunque lo deseen?

-la única forma de hacerlo es que su pareja muera- respondió de nuevo el anciano.

Las lagrimas querías salir de mis ojos, estos me ardían como si me estuviesen quemando viva…no podía creer lo que escuchaba…por un instante mi vista se dirigió a Leah y pude ver que ella estaba llorando a mares, quería consolarla, pero yo me sentía igual o peor que ella…

-pero…hay algo más que ustedes no saben de la imprimación…-dijo el viejo atarea con una sonrisa en su rostro.

- que mas?- dijimos Leah y yo con pesar.

- hay una leyenda que dice que hubo un tiempo en que los miembros de la manada cuando se transformaban podían hablar, con sus voces humanas hasta que  un lobo imprimado sufría mucho por el hecho de saber que un día perdería a la mujer que amaba, entonces desesperado invoco a los espíritus para pedirle por favor que no le arrebataran la vida de su amada, que él estaba dispuesto a dar lo que sea, entonces los espíritus les sacaron a los lobos el don de hablar a cambio de darle a sus imprimadas la inmortalidad…-no podía creer lo que escuchaba…Jake no podía despegar su mirada de la mía, ambos estábamos paralizados…

-enn…entonces eso quiere decir que tanto bella como yo no envejeceremos al igual que Sam y Jake?- pregunto mi amiga con notable emoción en la voz.

-eso mismo querida, es exactamente lo que estoy diciendo…es por eso que hoy se ha solicitado esta reunión del consejo, ustedes mis queridos jóvenes, son el futuro de esta manada, los hijos que ustedes tengan serán los futuros protectores, en ustedes vivirá la esencia de nuestra tribu…

Sin darme cuenta mi vista se conecto con la de Billy, este mostraba una enorme sonrisa, y en la mirada había una pizca de emoción…

El viejo atarea nos pido a Leah, Sam, Jake y yo que nos levantáramos, nos pidió que tomáramos las manos de nuestro compañero y hablo…

-como líder del consejo, le pido a los espíritus que protejan el vientre de estas mujeres, porque de ellas nacerán las nuevas generaciones de esta tribu, que protejan los cuerpos d estos hombres porque con ellos, libraran las batallas para mantenernos a salvo. Pero lo que más les pido es que cuiden el amor que se tienen porque  ese amor será la base de una nueva generación.

Luego paso una especie de sahumerio alrededor de nuestras manos.

Una vez terminada la ceremonia, todos nos dispusimos a cenar entre bromas, historias y canciones de la tribu….una vez que los mayores se fueron con los chicos fuimos al interior de la casa para continuar con la reunión ahí…